martes, 17 de julio de 2018

Como saber si estas con la persona correcta

Yo no creo que exista "The one" como lo llaman algunos, no creo que haya solo una persona en el planeta que sea la correcta para nosotros, una sola alma gemela en el mundo, más bien creo que es muy circunstancial, desde geográfica, temporal y hasta anímicamente y creo que hay muchas personas en el mundo con las que podríamos entendernos y compartir y estar contentos y tranquilos en una relación, pero depende mucho del momento en que nos encontremos y creo también que a veces nos cruzamos con personas con las que pudiéramos haber hecho una buena pareja pero que no era un momento adecuado para ellos o para nosotros.

Lo que debemos buscar no es a la persona o a la relación perfecta o correcta sino a la relación o  persona correcta para cada uno de nosotros. Como saber si estamos con la persona correcta es algo que todos quisiéramos saber cuando queremos tomar una decisión sobre seguir o no y para saber la respuesta hay una combinación de factores concretos en los que debemos fijarnos y también hay una parte subjetiva que bien analizadas ambas nos deben ayudar a obtener nuestra respuesta.

Según lo que he leído y lo que he visto, si existen algunos puntos importantes de como debemos sentirnos cuando estamos en la relación correcta. Escoger a la persona con la que queremos estar puede ser la mejor decisión o el mayor error de nuestra vida y de ahí que quisiera compartir lo que he aprendido que no puedo decir que sea el Santo Grial pero que si puede ayudar a que las probabilidades de tomar una buena decisión mejoren considerablemente.

Lejos de sentir mariposas como la mayoría piensan que debe suceder (pueden o no haber sucedido en las primeras salidas pero no es lo que marca que sea o no una persona correcta para ti), lo que se debe sentir es tranquilidad, te debes sentir cómodo estando con la persona y debes sentirte libre de ser tu con tus buenas y tus malas, con tu mundo, tu familia, tus amigos, tus actividades, no debes sentirte con la necesidad de fingir, de pretender, de callar, de evitar. Y así como uno debe sentirse tranquilo en la presencia de la persona, debe sentirse igual de tranquilo en su ausencia, no debe sentirse inquietud, miedo o ansiedad. Pensar a la persona cuando no estamos juntos y extrañarla es un síntoma de salud en el amor pero sentir que no se respira o que se muere cuando el otro no esta, es un síntoma de que hay algo disfuncional en la relación. Pensar o necesitar que todo lo que hacemos lo debemos hacer juntos no es un buen síntoma tampoco.

Debe sentirse que todo es fácil, debe fluir la vida de los dos sin necesidad de forzar nada, no debe haber dramas ni pleitos, debes sentirte como si fuera alguien que conoces de hace tiempo aunque no sea así, los malos entendidos se deben arreglar fácil porque ambos buscan soluciones y no problemas.

No solo piensas en sexo con la persona, cuando esto sucede quiere decir que el único canal de comunicación que tenemos con la persona es el sexual. Esto no quiere decir que no busques y quieras el acercamiento sexual, quiere decir que no puede ser el único canal en dónde nos conectamos. Como he dicho varias veces, de puro sexo no se construye una relación pero tampoco se debe armar una relación de pareja sin sexo, aunque curiosamente hay muchas más relaciones que funcionan con poco sexo y que duran más y son más equilibradas que relaciones que tienen mucho sexo y que son muy pasionales, estas normalmente no duran tanto y sufren de muchos altibajos, separaciones y pleitos constantes.

Tener un proyecto de vida o una visión del futuro similar creo que es importantísimo y es algo que no veo que las personas le den la importancia adecuada y a cierta edad es vital para poder tener una relación. Hay que recordar que escribo para personas que ya están en una segunda o  a veces tercera vuelta y que ya tienen 40 o más...¿Qué quieres de la vida? ¿Cómo te gusta vivir? ¿Cómo y dónde quieres vivir? ¿Cómo es la situación económica? ¿Cómo quieres o como puedes gastar el dinero? ¿Hijos, tuyos, míos, nuestros? ¿Matrimonio? ¿Unión libre? ¿Cada quien en su casa? ¿Te gusta el calor o el frío? ¿Eres activo o sedentario? ¿Finanzas compartidas o cada quien las suyas?¿ Entre los dos pagamos nuestra vida? Solo por poner un par de ejemplos, si alguien todavía quiere más hijos o por lo que sea en su primera vuelta no los tuvo y quiere tenerlos y el otro ya no quiere, es un factor de rompimiento absoluto, por más que se quieran. Si a uno le gusta vivir activo y despertar temprano y tener diferentes actividades y no le gusta desvelarse al otro le gusta estar en la cama toda la mañana y dormirse tarde, será difícil compartir. Si uno es muy social y su idea de fines de semana o de viajes es con gente y amigos y el otro es solitario y no le gusta estar con gente también puede ser complicado, y como estos hay miles de ejemplos.

Todos tenemos una lista de cosas que son negociables y otra de cosas que no lo son (y si no la tienes hay que hacerla para saber que quieres de la vida y saber que puedes escoger). Hay que decirla y ver si en realidad podemos compartir una vida juntos, no debemos callar nada para "encajar" en la situación y no porque nos amamos todo se va a arreglar.  Todo lo no dicho y acumulado siempre nos acaba alcanzando y ahogando.

En la relación correcta hay un sentido del humor compatible, no hay celos ni aprehensión, no hay agresión verbal, ni emocional, no hay chantajes, ambos mantienen su identidad, hay complicidad y se forma un equipo, estas motivado a ser la mejor versión de ti mismo, hay apoyo a los proyectos de cada uno y la comunicación es fácil, no te preocupa comprometerte porque en este tipo de relación el compromiso no significa una cárcel, y lejos de sentirte limitado te sientes motivado a crecer y a hacer, no pretendes cambiar a la persona. Las personas que están en una buena relación se caracterizan por sentir un alto nivel de satisfacción general en la vida, no solo en la relación.

Es fácil estar con cualquier persona cuando se trata de reírse, de pasarla bien y no hay mayores problemas, pero creo que la prueba máxima de una pareja es el saber salir de los malos momentos. La fortaleza de una relación depende en gran medida de como funcionan ambos cuando hay que salir de un problema, y es en los malos momentos cuando el haber hecho la elección correcta de la pareja marca la diferencia entre resolver y seguir o quedarte atorado en el pantano.

Todas los factores anteriores son palpables, objetivos y concretos, sin embargo hay un último factor que es subjetivo y es lo que nos dice nuestro yo interior, o nuestro sexto sentido y que siempre hay que tomar en cuenta para tomar la decisión final. Yo creo que en el fondo siempre sabemos cuando no estamos en la relación correcta y lo ignoramos pensando que otros factores como el tiempo, el amor o la vida cambiaran o mejoraran la situación. Creo que si tomamos en cuenta todo lo anterior y le sumamos nuestro sentir debemos poder tomar la decisión correcta para escoger a la persona con la que queremos caminar por la vida y así poder evitar un rompimiento futuro que siempre resulta doloroso y que además sabíamos desde el principio que no iba a  funcionar....

viernes, 6 de julio de 2018

El amor maduro y libre

Como adultos no podemos pensar que el amor por si solo es suficiente para estar con alguien, el amor no puede ser una cuestión meramente emocional, debe ser también un sentimiento reflexivo. Sentir atracción por alguien simplemente sucede pero estar en pareja y amar a alguien día con día es una elección.

Crecemos con una idea de lo que es el amor muy romántica y muy idílica y que en la vida práctica no siempre funciona cuando queremos formar una pareja. Es cierto que no se puede formar una pareja sin amor y sin atracción física pero es más cierto que no se puede formar una pareja de puro amor o de pura atracción.

El primer principio a entender es que nadie es dueño de nadie, que una pareja son dos individuos con vidas independientes que deciden caminar juntos por la vida para acompañarse y para apoyarse y no para fundirse en uno solo.

El segundo principio es que cada quien es responsable de lo que siente y no puede responsabilizar al otro por sus propios sentimientos.

El tercer principio es que el verdadero amor solo crece en libertad, la esclavitud emocional asfixia y eventualmente termina destruyendo. Amar desde la libertad significa que sabemos que el otro tiene derecho a tomar sus propias decisiones y a decidir como quiere vivir su vida, significa entender que la persona QUIERE pero no TIENE que estar con nosotros.

Es importante no confundir la libertad con el libertinaje, la libertad significa escoger lo que queremos y sentirnos libres de actuar y ser responsables de nuestros actos, el libertinaje es el abuso desenfrenado e irrespetuoso de la libertad. Ni en la vida ni en el amor se puede funcionar con libertinaje.

La libertad debe ir acompañada de la confianza y de una comunicación sana y funcional, debemos sentirnos libres de comunicarle a la pareja nuestros planes y nuestros sentimientos sin sentir que habrá enojo, juicio o coerción de su parte, la pareja debe ser un lugar de confianza y comprensión dónde se pueda depositar lo mejor de ambos.

Así como es importante la libertad, también es importante el pasar tiempo juntos para seguir creciendo en la intimidad, se debe lograr un equilibrio entre el tiempo que pasamos solos o con amigos y el tiempo que pasamos en pareja. ¡El equilibrio es el principio máximo de la vida!

Entre más libre se siente la persona en una relación, más tranquilo y mejor se sentirá para estar con la pareja, una persona que se siente libre ama mejor porque no se siente sofocada ni limitada, porque no siente que tiene que negociar todo o que cada cosa que decida habrá un pleito, no siente una esclavitud emocional por lo que podrá tener libertad de ser y de estar.

Para ser capaz de otorgar y tener esta libertad en pareja, ambas partes deben eliminar las inseguridades, deben tener una buena auto estima y respeto a si mismos, deben tener madurez emocional, deben tener una vida propia, amigos, trabajo, actividades, planes, viajes, proyectos, deben tener una vida tan completa que no se NECESITEN el uno al otro, y solo así podrán estar juntos por que tienen la libertad de escoger. Solo dos seres humanos completos e independientes pueden formar una pareja sana y estable, el que aún busca su otra mitad, tendrá que seguir buscando dentro de si mismo para encontrarla y después estar con alguien.